100 años de Fátima, el misterio continúa
Los secretos
¿Cuáles eran los “secretos” que la Dama había revelado a los niños?
Aunque se habla de tres secretos y, en los últimos años, se ha añadido un cuarto, las fuentes más antiguas afirman que se trata de una única revelación o profecía que se habría dado a conocer en tres partes.
Lo cierto es que los niños guardaron para sí mismos las revelaciones durante mucho tiempo.
Fallecidos los dos hermanos, Lucía se convirtió en la única depositaria del Secreto, negándose durante mucho tiempo a revelarlo por entero.
Forzada por la Iglesia a ponerlo por escrito, lo reveló en tres partes separadas, dos de las cuales fueron entregadas a la custodia del Papa Pío XII en 1941.
La tercera parte no la entregaría hasta 1957, bajo la promesa del mismo Papa en el último año de su pontificado.
Pero, no se abriría antes de 1967.
En la Primera explicaba la visión del infierno como “un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra, en el que estaban los demonios y las almas humanas. Los demonios se distinguían por sus formas horribles y asquerosas de animales espantosos y desconocidos, pero transparentes y negros”
En la Segunda profecía, anunciaba el fin de la segunda guerra mundial, pero amenazaba con una segunda si la gente no se arrepentía y, sobre todo, si Rusia no se convertía.
“Si se escuchan mis peticiones, Rusia se convertirá y tendrán paz; si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia”, fueron las palabras de la Virgen.
Estas dos revelaciones fueron publicadas en 1941.
La primera Guerra Mundial ya había acabado y la Segunda ya había empezado y, por supuesto Rusia no se había convertido, por lo que no se puede confirmar la veracidad de que fuera realmente una profecía.
Durante los diez años siguientes, El Papa Juan XXII, cuyo pontificado duró desde 1958 hasta 1963, se mantuvo fiel a la promesa y no reveló el tercer secreto, se ignora si lo abrió o no.
El siguiente Pablo VI, quien ejercería hasta 1978, estimó que el mundo no estaba preparado para recibirlo y lo mantuvo en secreto.
Juan pablo I, no tuvo tiempo en sus 33 días de pontificado en revelar nada y se ignora si lo leyó.
Su sucesor Juan Pablo II, en el año 2000 y tras haberse recuperado “milagrosamente” del atentado perpetrado por el turco Ali Agca, hizo que el tercer secreto era justamente la profecía de un Papa muerto en un atentado.
Dado que él había sufrido ese intento de asesinato y atribuyendo su salvación a la Virgen, podía ya revelar el Tercer Secreto.
Cosa que hizo en su tercera visita a Fátima el 13 de mayo de 2000.
Anteriormente había acudido en otras dos ocasiones como peregrino y para bendecir y consagrar el lugar, así como para anunciar la beatificación de los dos hermanos fallecidos.
Pero claro nada es tan fácil ni tan claro como pudiera parecer.
Desde 1967, Lucía, Sor Lucía como era conocida ya, viendo que el Tercer Secreto no se revelaba, comenzó a hacer presión para que fuera hecho público, cosa que no consiguió.
Al parecer, con el paso de los años, le resultaba acuciante que ese tercer secreto fuera desvelado. Viendo que los años pasaban, habría confiado a alguien más, no se sabe si ajeno o no a la Iglesia católica, una copia manuscrita de ese tercer secreto.
El caso es que, mientras esos años pasaban, internet hizo su aparición y en 2010, apareció publicado de forma anónima el texto manuscrito que podría ser el original de la tercera revelación.
No se puede, dado su carácter de publicación anónima, confirmar la veracidad del documento.
Pero varios expertos calígrafos que la han analizado, afirman que está escrito por Sor Lucía, comparándolo con los otros manuscritos.
Esta publicación en Internet habría “forzado” al entonces Papa Benedicto XVI a publicar otra parte de este tercer secreto. Aunque son muchos los que niegan su autenticidad ya que la caligrafía no se ajustaría a la de la auténtica Sor Lucía.
Y digo esto porque son muchos los que afirman que Lucía fue poco más o menos que “encarcelada” en el convento Carmelita en cuanto empezó a “presionar” para que el Tercer Secreto fuera revelado y que murió poco después, siendo sustituida por una doble que vivió igualmente confinada.
El caso es que este Documento anuncia no solo la muerte del Pontífice sino el fin de la Iglesia Católica. Con un Papa con “ojos de demonio” y apostasía dentro de la Iglesia entre sus más altos cargos.
Hay que considerar que Juan Pablo II sufrió no uno, sino, dos atentados contra su vida.
El más conocido efectuado por el turco Ali Agca y en el que se temió seriamente por su vida, aunque se recuperó milagrosamente. Sufrió un segundo atentado, efectuado por un sacerdote español, Juan María Fernández Krohn, que armado de una bayoneta, intentó asesinar al Papa en su segundo viaje a Fátima en 1982.
En su atentado logró herir al Papa. Aunque éste dice que no llegó a tocarle porque no le dio tiempo a sacar la bayoneta y numerosos testigos corroboran su versión. Durante el juicio, dijo que estaba en contra de las reformas del Concilio Vaticano II y que, él creía, que el Papa Juan Pablo II era un agente secreto de la entonces URSS con intención de corromper el Vaticano.
Juan María Fernández Krohn cumplió 14 años de condena por ese intento de asesinato, mientras que el turco Ali Agca, gozó de la intercesión Papal y cumplió solo 3 años.
Mientras que el turco mostró lágrimas y arrepentimiento por sus actos, el ex – sacerdote español continúa diciendo que, si bien hoy actuaría de otra forma, no se arrepiente de sus actos en el contexto de su pensamiento de la época.
A pesar de esos dos atentados Juan Pablo II salió vivo, lo cuál no es lo que se afirma en la Tercera Profecía.
Los estudiosos de las profecías ven una relación entre ésta y las profecías de San Malaquías. En éstas, el santo afirma que tras el último Papa Pedro “el Romano” llegaría el anticristo y el fin de la Iglesia.
Según esta profecía, Benedicto XVI, habría sido el Papa número 111, o sea el antecesor de Pedro el Romano, número 112 y último Papa.
Pero, nos encontramos con que el Papa Francisco no es Pedro el Romano. Y, a decir de los estudiosos, tampoco es el Papa 112, puesto que Benedicto XVI, dimitió y no murió en su cátedra, cosa que es al parecer imprescindible para que la profecía sea cierta.
Tenemos pues al Papa Francisco, ocupando el número 111 en la numerología Papal de San Malaquías (veremos como lo casan ahora con lo del Olivo) y esperando a ver cuánto dura y quién es el próximo Pedro, el Romano.
Por otro lado resulta curioso que el Papa Francisco, tiene al parecer un número creciente de enemigos. Entre los que muestran posturas más radicales dentro y fuera de la Iglesia y, por tanto, en contra de las acciones aperturistas que éste está realizando.
Ha comentado en varias ocasiones que teme por su vida y que piensa que no durará muchos años.
Hay quién afirmaba que estaba convencido de que sería víctima de un atentado en su última visita a Fátima del 13 de mayo, en la conmemoración del centenario, hecho que, afortunadamente no se produjo.
Podéis ampliar la información en las siguientes páginas:
https://es.wikipedia.org/wiki/Misterios_de_F%C3%A1tima
http://www.bbc.com/mundo/noticias-39908413
https://bibliaytradicion.wordpress.com/inquisicion/el-milagro-del-sol-en-fatima/
https://moimunanblog.com/el-autentico-tercer-secreto-de-fatimafinalmente-revelado/
https://infovaticana.com/2017/03/29/el-tercer-secreto-de-fatima-un-papa-con-ojos-de-demonio/
http://soldadosdeunaidea.blogspot.com.es/2016/09/entrevista-juan-m-fdez-krohn-i.html
